El olor a putrefacción se
percibía unos cuantos metros antes de llegar al cuerpo. Estaba medio enterrado bajo la
hojarasca, boca arriba. La hinchazón del vientre era cada vez mayor, la piel
comenzaba a deslizarse y las larvas salían a borbotones por la boca. Las
observó con fascinación.
Era la tercera vez que lo
visitaba.
Tomó un par de fotos, y se
dispuso a acercarse al siguiente cuerpo.
Todos los mamíferos bostezan, desde estados prenatales hasta avanzada edad. Incluso se ha observado en otros vertebrados como peces, tortugas, cocodrilos y aves patrones de "apertura de boca" similares al bostezo, si bien la homología del bostezo entre distintas especies es discutida.
"Pseudociencia. Mentiras, fraudes y otros timos" de Darryl Cunningham no es simplemente un libro sobre divulgación científica. Tampoco es un cómic al uso. Es ambas cosas y más: un libro ameno pero riguroso que ahonda en algunos de los temas más controvertidos de nuestro tiempo, y la visión desde la ciencia que se tiene de ellos. Con un dibujo limpio y un lenguaje cercano para todos, y respaldado por una extensa bilbiografía; aborda temas polémicos de la actualidad, en una línea progresiva desde aquello que nos afecta más singularmente hasta lo más global. Así, desde la terapia electroconvulsiva hasta el negacionismo científico, pasando por la homeopatía, la evolución, o el cambio climático entre otros; el autor desenmascara supuestas verdades y da validez a hechos cuestionados según los intereses de quién... Y lo más importante, invita al pensamiento crítico.
• cambio climático • terapia electroconvulsiva
• la llegada a la luna • homeopatía • evolución
• la vacuna triple vírica (sarampión, paperas y rubeola)
• quiropraxis • negacionismo científico • fracking
Cunnigham, Darryl (2012). Pseudociencia. Mentiras, fraudes y otros timos. Léeme Libros. Madrid 2014. 208 páginas.
Una de las preguntas claves de la evolución es el origen del sexo. Se han desarrollado muchas teorías para explicarlo... Y para entenderlo. Para profundizar en el tema, desde La Biothèque recomendamos 3 libros divulgativos fáciles de entender por todo el mundo, que conjugan amenidad con rigurosidad y buenas dosis de humor:
(*) Elena es licenciada en Biología por la UAM (Universidad Autónoma de Madrid) y con máster en Ecología por la UAM-UCM (Universidad Autónoma de Madrid-Universidad Complutense de Madrid). Le apasiona el comportamiento animal y la ecología evolutiva, lo que le llevó a trabajar con primates en un primer encuentro con la investigación y después con escarabajos. Aunque parece tener claro que le gustaría dedicarse a la Educación Ambiental, no descarta otros caminos y actualmente busca su lugar en el mundo... Y mientras, lo explora.
¿Sabías que uno de los zorros más pequeños del mundo, el Zorro isleño (Urocyon littoralis) tiene aproximadamente el tamaño de un gato? ¿Y que una de las ratas más grandes descubiertas en los últimos tiempos, la Rata lanuda de Bosavi (¿Mallomyssp.?) mide alrededor de 82 cm de longitud y pesa 1 kilo y medio? Estas especies son casos de enanismo y gigantismo y que poseen algo en común: viven en islas.
El pequeño Zorro isleño, que vive
en las islas Channel de EE.UU.
Estrenamos la serie de posts "De enanos y gigantes: la regla insular" en la que trataremos de explicar las hipótesis que abordan el gigantismo y el enanismo insular, veremos los casos donde se cumple (o no) esta norma y haremos un repaso a la situación actual de las investigaciones sobre estos fenómenos... Y el "acalorado" debate al respecto.
En esta primera parte, veremos qué predice la famosa Regla Insular y las hipótesis que a partir de ella se han generado para explicar la presencia de especies enanas y gigantes en los ecosistemas insulares.
En el anterior post sobre "Microorganismos y humanos en
un mundo cambiante”, tratamos la idea de que nuestro cuerpo podría
considerarse un “superorganismo”, en el que nuestro metabolismo
representaría un amalgama de atributos microbianos y humanos; y realizamos un
breve repaso a la flora microbiana normal humana por las distintas partes de nuestro cuerpo. En este post,
analizamos la naturaleza de la relación entre los microorganismos y los
seres humanos, y cómo los cambios en nuestra forma de vida están
afectándonos a unos y otros organismos.
Es una suave mañana de mediados de mayo. Ali toma al sol, aparentemente adormilada, pero en realidad vigilante ante posibles apariciones indeseadas. Tumbada sobre la roca, nota como el sol le va calentando la piel y el cuerpo lentamente, mientras una suave brisa mueve las hojas de las encinas y hace que se mezan las jaras. Al cabo de unos minutos, sintiéndose plenamente satisfecha de tanto sol y notando como su cuerpo se activa, decide marcharse en busca de algo que picar.
De acuerdo con las últimas estimaciones, el 90% de las células presentes
en el cuerpo humano no son, precisamente, humanas: bacterias, hongos y otros
microorganismos pueblan nuestro organismo. Sólo el intestino humano contiene de
media 40.000 especies de bacterias y se estima que posee 9 millones de genes únicos
pertenecientes a células bacterianas, que podrían superar en 10 veces al número
de células humanas. Sin embargo, sólo aproximadamente el 1% de la microbiota
humana ha sido caracterizada e identificada. Así, en 2007, el Instituto
Nacional de la Salud
de Estados Unidos (U. S. National
Institutes of Health) lanzó el Proyecto Microbioma Humano (Human Microbiome Project), con el
objetivo principal de financiar investigaciones que nos permitan conocer los
componentes microbianos genéticos y metabólicos en el ser humano, así como
entender cómo contribuyen al funcionamiento normal fisiológico del organismo y su relación con la
predisposición a enfermedades. Porque, como apuntan algunos autores, los seres
humanos deben ser considerados como “superorganismos” cuyo metabolismo
representa un amalgama de atributos microbianos y humanos.
This
is the last post of the series about Biodiversity on Islands. After talking
about Island characteristics and Island Biogeography, let’s turn to Extinction
on islands.
Cíes, by Anxo Resúa on Flickr (some rights reserved)
The
rate of extinction on islands is very high; for example the 93% of birds’
extinctions since XVII century were on islands. The
high percent of extinctions is explained because of the fragility of the
ecosystem. That’s present on:
·Small populations
·Unstable demography
·Genetic problems
·Extreme environmental conditions
Although
there were cases of extinctions by natural causes, during the last 500 years
the main responsible is the human, direct or indirectly.
In this post, we’re going on with the overview of Biodiversity on Islands. In a previous post, we talked about Island features. Now, let’s move on Island Biogeography to explain how species distribution on islands is.
II. Island Biogegraphy
We would like to summarize the main ideas of the theory of Dynamic Equilibrium on Islands by MacArthur and Wilson (1967).
The key concept is that island biogeography depends on island size and the distance to mainland by processes of extinction and immigration.
In this and next posts, we're going to give you a brief overview of Biodiversity on islands. First of all, a few questions:
Did you know most of the largest and smallest species on the world live on islands? For instance, Galápagos giant tortoise (Geochelone nigra), an example of gigantism, and Japanese wolf (Canis lupus hodophilax), an example of dwarfism (Extinct).
Of 592 species of birds, just Scottish Crossbill (Loxia scotica) is the only bird endemic species of United Kingdom (0’17%). However, Hawaii has got 322 species of birds, 53 of wich are endemic (16’2%), as for example 'I'iwi or Scarlet Hawaiian Honeycreeper (Vestiaria coccinea) or Hawaiian Goose or Nēnē (Branta sandvicensis). Why has Hawaii got a smaller number of species than United Kingdom but most of them are endemic?
Over the last 500 years, the majority of documented extinctions have been on islands, as opposed to mainlands, for instance for both terrestrial vertebrates and plants. Why most extinctions occur on islands?
In this review about Biodiversity on islands, we'll try to explain these and other facts. At first, we'll talk about special characteristics of this biodiversity. Then, we'll go on explaining the factors which determine the distribution of species on islands (Island biogeography). Finally, we'll analyze how extinction works on them.
El Calamar opalescente (Loligo opalescens) es un pequeño calamar que vive entre la superficie y 200 m de profundidad en la costa Oeste de Norteamérica. El macho tiene uno de sus brazos modificados para la cópula, el brazo hectocótilo, con el que transfieren los espermatóforos (unas cápsulas donde va encerrado el esperma) a la hembra durante la cópula. Cuando está "excitado", sus brazos cambian de color gracias a cromatóforos rojos. Se congregan en grandes números para copular al mismo tiempo, en una especie de "orgía"; tras lo que las hembras depositan los huevos fecundados en "puestas comunitarias" en el fondo del mar. Tras la reproducción, los adultos mueren.
Opalescent squid (Loligo opalescens) is a small squid who lives from the surface to a depth of 200 m on western coast of North America. Males have got a modified arm for mating, hectocotylus arm for spermatophore (a capsule containing sperm) transfer to females during mating. When male is "excited", its arms turn to red thanks to cromatophores. A lot of individuals congregates to mating at the same time, like in an "orgy". After that, females lay eggs as "common spawns" on the bottom of the sea. After reproduction, adults die.
Bibliografía / Bibliography:
Brusca, R. C. & Brusca, G. J. 2003. Invertebrates. Second Edition. Sinauer Associates, Sunderland, MAssachussets, USA.
Erhardt, H. & Moosleitner, H. 1998. Marine Atlas, Vol. 3. Steven Simpson Books, Brighton, UK.